Las fuertes declaraciones realizadas por el líder de Somos Melilla a colación de la compra de Villa Pilar por parte de la Ciudad Autónoma, en las que dijo que a "Imbroda le gusta el verde, pero el del dinero", jugando con el carácter de inversión medioambiental con el que revistió el Ejecutivo la inversión en la finca rústica, le han costado una querella.
El Gobierno de la Ciudad anunció la misma con la intención de perseguir al líder de la formación localista en los juzgados al entender que su crítica cruzó una línea intolerable.
Amin Azmani no se ha escondido después de la denuncia y ha manifestado que "será un honor acudir al juzgado para ratificarme en todo lo declarado".
Más aún, ha aprovechado para re insistir en sus críticas y ha explicado que considera "una auténtica barbaridad que el Gobierno afirme que la finca está valorada en 2 millones de euros" cuando según anuncia su formación maneja informes y valoraciones "que dicen todo lo contrario" y que rebajarían el precio de Villa Pilar de forma notable.
