El Partido Popular de Melilla ha reclamado al Gobierno central que atienda su propuesta para ampliar las rotaciones marítimas entre la ciudad autónoma y la península, especialmente con el puerto de Almería. En una nota de prensa, el coordinador de Estudios y Programas del partido y presidente de la Autoridad Portuaria, Manuel Ángel Quevedo, ha lamentado la reducción del número de rotaciones semanales, que han pasado de 21 en el año 2024 a solo 12 en la actualidad.
Quevedo ha recordado que esta iniciativa no es nueva, ya que fue el presidente de la Ciudad Autónoma y líder del PP local, Juan José Imbroda, quien la trasladó por escrito al ministro de Transportes a comienzos de este año. Según el dirigente popular, el mantenimiento de al menos cuatro rotaciones semanales con Almería sería “imprescindible” para cubrir tanto la demanda ciudadana como las necesidades logísticas de los comerciantes.
“La pérdida de conexiones con Almería solo puede revertirse modificando el contrato marítimo e incorporando más rotaciones, tal y como propusimos desde un inicio”, ha señalado.
Además, Quevedo ha cargado contra la delegada del Gobierno por haber planteado “de forma unilateral” un intercambio de horarios entre las rutas de Motril y Almería, sin contar con la Autoridad Portuaria, los empresarios ni las navieras. Una decisión que, a su juicio, carece de estudios técnicos, de consenso y de sensibilidad hacia sectores que dependen directamente del tráfico marítimo.
El presidente de la Autoridad Portuaria ha advertido también de que esta modificación podría afectar a miles de viajeros con billetes ya adquiridos, muchos de ellos vinculados a la próxima Operación Paso del Estrecho, lo que generaría serias complicaciones logísticas.
Este asunto ha sido uno de los principales temas abordados en la Comisión de Desarrollo, Universidad y Transportes celebrada esta semana en la sede del PP, coordinada por Esther Donoso, Esther Azancot, Jesús Romero y el propio Quevedo. Durante la reunión se trataron también otros temas relacionados con la economía local, como las becas y ayudas de Promesa, la formación para jóvenes y empresas, el impacto de los bonos turísticos, así como el avance de los estudios universitarios en Melilla.
